Para prevenir el acoso escolar en los centros educativos, es clave proporcionar al alumnado herramientas emocionales y de comunicación que les empoderen y pongan en valor la importancia de ser personas únicas y diferentes entre sí. Una de las más importantes es la asertividad.
¿Qué es la asertividad?
Se trata de una habilidad de comunicación que permite expresar ideas, deseos, y necesidades de manera honesta y respetuosa, defendiendo los propios derechos sin menoscabar los de los demás. A diferencia de una actitud agresiva, que busca imponer; o pasiva, que se somete, la asertividad encuentra un punto intermedio: respetar al otro sin renunciar a uno mismo.
Una persona asertiva es capaz de decir “no” sin sentirse culpable, expresar opiniones aunque puedan diferir de las de los demás, y enfrentar conflictos sin recurrir a la agresión o la evasión. Esto fomenta una comunicación abierta, directa y respetuosa, cualidades esenciales para construir un entorno escolar más seguro y positivo.
¿Qué impide a los niños ser asertivos?
Existen factores que pueden dificultar el desarrollo de esta habilidad, y normalmente tienen que ver con el modelo educativo que tienen los niños, tanto en casa como en la escuela.
Niños y niñas que han vivido estilos de crianza muy autoritarios o, por el contrario, muy permisivos, pueden reprimir sus opiniones; bien por temor a represalias en el caso de los criados en entornos autoritarios, o bien por inseguridad en los casos en los que ha habido falta de límites claros. Además, la infancia que vive estos entornos de crianza no suele tener modelos claros de asertividad, por lo que no dispone de ejemplos para aprender a expresarse de un modo equilibrado.
Suelen ser niños/as que temen el juicio ajeno o los conflictos, posiblemente porque hayan vivido experiencias previas de fracaso, agresividad o burlas en lugar de la validación de sus sentimientos y opiniones; y muy probablemente también han experimentado cambios bruscos en sus vidas o dificultades académicas que les hagan estar a la defensiva para protegerse.
Por otro lado, hemos de estar muy atentos al tipo de grupo que se forma en el aula y las dinámicas sociales que este genera, ya que pueden reforzar comportamientos pasivos o agresivos entre sus miembros.
¿Por qué es importante trabajar la asertividad en el aula?
El aula, además de un lugar de aprendizaje, es un lugar de convivencia: al igual que en cualquier lugar de trabajo, niños y niñas comparten mucho tiempo con las mismas personas durante prácticamente todo el año en un espacio o espacios concretos.
Por ello, depende de todos los integrantes del grupo-aula el generar una buena convivencia basada en el respeto y la tolerancia para vivir su día a día de un modo placentero y positivo, disfrutando así de una buena salud emocional.
Trabajando la asertividad en el aula, se proporcionan herramientas a los niños y niñas para enfrentar y solucionar problemas de su vida cotidiana; ya que aprenden a expresar su opinión y a respetar la de los demás, siendo empáticos/as y tolerantes, elementos claves para frenar situaciones de abuso.
Integrando esta valiosa habilidad en nuestra labor docente, estaremos promoviendo una educación basada en el respeto y el cuidado mutuo, valores esenciales para combatir el acoso escolar y formar futuros ciudadanos responsables.
Es por ello, que este curso 2024-25, en el Paso 2 de nuestro programa educativo, hemos decidido incorporar materiales que fomentan esta habilidad tan importante para conseguirlo.
Y es que, dentro de las recomendaciones metodológicas de la LOMLOE está la de “dotar al alumnado de herramientas que le permitan identificar, gestionar y expresar asertivamente sus emociones y sentimientos, además de promover el contacto afectivo y empático con los demás”.
Nuevos materiales: Aventuras Sonoras
Los nuevos materiales de Somos Únic@s para trabajar la asertividad son las Aventuras Sonoras, unos audiocuentos de contenido didáctico con historias y personajes adaptados a cada una de las etapas educativas de Primaria.
Las Aventuras Sonoras constan de 3 historias por etapa educativa, que invitan a la reflexión y al debate gracias a las preguntas abiertas que el narrador va lanzando a los oyentes a lo largo de la trama. Estas preguntas facilitan que docentes y alumnado puedan reconocer las distintas actitudes, empatizar con los personajes e identificar comportamientos asertivos que resuelvan el malentendido o conflicto surgido en cada historia
De este modo, propician que aprendan a decir NO ante actitudes o situaciones en las que no se sientan cómodos/as, y a comunicar lo que piensan o sienten de manera eficaz y respetuosa.
La asertividad no solo ayuda a enfrentar y prevenir el acoso escolar, sino que también contribuye a formar personas más seguras, empáticas y resilientes. Si queremos trabajar contra el acoso en clase, nos ofrece un enfoque positivo y accesible para abordar esta problemática desde la raíz, empoderando a las víctimas, a los testigos y a todos los miembros de la comunidad escolar para posicionarse contra el bullying de manera eficaz y respetuosa.
Post anterior