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Hablamos de ciberbullying

Lunes, 3 de febrero de 2025

Como hemos podido ver en el I Estudio sobre el acoso escolar y el ciberacoso en España en la infancia y la adolescencia, realizado por la Fundación ColaCao y la Universidad Complutense de Madrid, en las dos últimas décadas el acoso escolar se extiende también a través de dispositivos digitales, convirtiéndose en ciberacoso.

Según los datos del estudio, haber sufrido acoso escolar incrementa el riesgo de sufrir ciberacoso: casi la mitad de las víctimas de bullying (46,4%) reconoce haber sufrido alguna situación de maltrato digital. El 10,7% del alumnado reconoce haber sufrido como víctima una situación de maltrato entre iguales a través de dispositivos digitales, que podría derivar en ciberacoso. En este punto, lo sufren más las chicas (12,7%) que los chicos (8,7%). Este problema se evaluó a partir de 5º de educación primaria, edad en la que comienza a generalizarse el uso de dispositivos digitales sin presencia adulta.

El avance de la tecnología ha transformado la forma en que los estudiantes interactúan entre sí, pero por desgracia, también ha dado lugar a nuevas formas de agresión. Como docentes, es importante entender este fenómeno, para poder detectar sus signos y aportar medidas para prevenirlo también desde el aula.

Pero, ¿qué se considera exactamente ciberacoso? Se trata del acoso o intimidación realizado entre usuarios de una edad similar y contexto social equivalente, que se lleva a cabo a través de las tecnologías digitales en plataformas como redes sociales, de mensajería, juegos en línea o smartphones. Se caracteriza por un comportamiento que suele ser repetitivo, con la intención de atemorizar, molestar o humillar a otras personas.

¿Cómo detectar situaciones de ciberacoso?

El ciberacoso puede ser difícil de identificar porque ocurre en espacios virtuales. Sin embargo, hay signos que los docentes pueden observar para identificar a posibles víctimas:

  • Cambios repentinos de ánimo o comportamiento, como tristeza, ansiedad o irritabilidad.
  • Descenso en el rendimiento académico.
  • Aislamiento social y evitar actividades grupales.
  • Reacciones de nerviosismo al usar dispositivos electrónicos.
  • Quejas frecuentes de dolores de cabeza o malestares físicos sin causa aparente.

En el caso de los estudiantes que ejercen el acoso, estas pueden ser algunas de las señales de alarma:

  • Comportamientos hostiles o despectivos hacia compañeros.
  • Uso constante y reservado del teléfono o la computadora.
  • Reacción defensiva o negativa al ser cuestionados sobre su actividad en línea.

¿Qué podemos hacer para prevenir el ciberacoso?

Además de promover un ambiente de respeto y empatía en el aula, el ciberacoso requiere de estrategias concretas que tienen que ver con el entorno online.

Es fundamental que eduquemos a nuestro alumnado en un uso responsable de la tecnología y las redes para navegar siempre de un modo seguro, respetuoso y mantenerse alerta en todo momento. Esto incluye enseñarles a:

  • No compartir información personal.
  • Adoptar una conducta ciberresponsable en entornos de comunicación digital.
  • Informar a un adulto de confianza si son testigos de ciberacoso.

Además, es importante crear un espacio seguro donde los estudiantes puedan denunciar casos de bullying y ciberacoso de manera confidencial. Esto puede incluir buzones de sugerencias, plataformas anónimas online o reuniones privadas con los docentes o el orientador escolar.

Por supuesto, es importante involucrar a las familias de tu alumnado para que en casa también estén atentos a cualquier señal que indique peligro. Para ello, puedes promover que en tu centro educativo se realicen reuniones informativas sobre el ciberacoso, sus riesgos y cómo pueden detectarlo en casa; y promover acciones para que centro y AFAs aborden el problema de manera integral.

Somos Únic@s como herramienta de prevención del ciberbullying

Integrar la prevención en el día a día incluye realizar actividades específicas sobre ciberacoso en clase, y en programas educativos como Somos Únic@s, estas están contempladas en las dinámicas y materiales interactivos del 3º ciclo.

Los materiales en formato Genially “Vivir el ciberacoso” y el Role-Play sobre ciberacoso, os ayudarán a identificar aquellas actitudes y tipo de mensajes que derivan en ciberacoso, y luego, gracias al debate posterior, ayudar al alumnado a contrarrestarlas, garantizando una conducta ciberresponsable y fomentando la empatía también en entornos digitales.

Ponte en marcha contra el ciberacoso, ¡el bullying lo paramos entre tod@s!

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